Todos los partidos importan: 11 trucos para que sean un éxito (incluidos los amistosos)

Como todos sabemos, muchos españoles prefieren ver los partidos de fútbol en el bar. El entorno, la emoción que se genera y compartir los triunfos o las derrotas con los amigos hacen que, lo que en otro escenario sería un evento deportivo más, se convierta en una experiencia única.

En circunstancias tan propicias, resulta casi imposible que los hosteleros no puedan monetizar un partido. Para aquellos que aún así necesiten un empujoncito, vayan algunos consejos destinados a que las jornadas de fútbol sean una victoria por goleada:

1.- Abonarse a los canales que emiten fútbol para poder disponer de la mayor oferta

Evidentemente esto es necesario. Aunque no debemos verlo como un gasto, sino como una inversión  

2.- La pantalla, grande y con buen sonido

Los espectadores no solo valoran la calidad de la imagen, también quieren escuchar la narración, aunque aquí las opiniones difieren: los hay que prefieren los locutores de la televisión y otros, los de su emisora de radio favorita. Los hosteleros que se decidan por esta segunda opción, ¡cuidado!, en ocasiones hay retardo y pueden cantar el gol en la radio antes de que empiece la jugada en televisión (y viceversa).

3.- Hay que elegir bien los partidos

No solo las grandes competiciones son atractivas para los clientes. Un partido de segunda de un equipo local puede despertar más pasiones y generar más rendimiento económico que una final europea. ¿La razón? Que ese tipo de encuentros apelan al sentimiento de pertenencia a un barrio, un pueblo o cualquier comunidad en la que el vínculo con el lugar es más estrecho que en una gran ciudad y, en consecuencia, se viven con más intensidad.

4.- Informar al público

Igual que se informa del menú del día o de las especialidades de la casa en pizarras y carteles dentro y fuera del local, es aconsejable anunciar los encuentros con tiempo suficiente para que los clientes se enteren, puedan organizarse y avisen a la familia de que «mañana no me esperéis a cenar, que he quedado para ver el partido en el bar».

5.- El servicio de reservas

Los clientes habituales agradecerán que los visitantes ocasionales no ocupen sus lugares favoritos para disfrutar el fútbol. Para eso, nada mejor que dar la posibilidad de reservar sitio el día de partido. Además, saber de antemano la gente que asistirá, permite calcular la comida y la bebida que se ha de preparar. Double win!

6.- El fútbol como inspiración

Aprovechar la afición de los clientes para hacer una carta temática inspirada en el fútbol es una iniciativa simpática que les animará a probar esas nuevas especialidades. La mitad de un sándwich puede ser un “córner”, las aceitunas negras “el equipo arbitral”, cuatro cañas una “barrera”, bolitas de queso balones y las rabas, unas “rabonas”.

7.- Saber competir

Cuando se trata de fútbol, hay que ser competitivo. Comparar los precios y las especialidades de los demás bares de la zona permitirá hacer ofertas y servir aquellas variedades gastronómicas que nadie más tiene en su carta. Diferenciarse del resto de locales siempre es útil, también a la hora de ser elegido para ver los partidos.

8.- Venir pronto y marcharse tarde

Un partido de fútbol dura noventa minutos, a los que hay que sumar un descanso de media hora. En total, los aficionados pasan en el local alrededor de dos horas, que podrían ser más si se consigue que lleguen antes y decidan quedarse comentando el encuentro una vez finalizado. Para ello, nada mejor que ofrecerles descuentos o packs de bebida y tapa en la previa y copas en “el tercer tiempo”.

9.- ¡A la porra!

Organizar una porra sobre los resultados de la jornada mantiene el interés de los clientes durante la semana y caldea el ambiente para los días de partido. Además, no será raro que el ganador reinvierta los beneficios en el bar invitando a los amigos para celebrar su triunfo.

10.- ¡Aprovecha tus redes sociales!

Son una herramienta útil, económica y ágil para recordar a los clientes cuándo hay partido e informarles de las propuestas gastronómicas o las ofertas. También es posible organizar sorteos u ofrecer descuentos en las consumiciones a cambio de retuits, de compartir fotografías de tu local y de interactuar con otros usuarios.

11.- Neutralidad ante todo

Una de las cosas que más valoran los clientes es la cordialidad y el buen trato. Por eso es conveniente que el bar, salvo que pertenezca a una peña, no muestre en exceso sus afinidades deportivas para no molestar a los clientes del equipo contrario. De hecho, si hay varios clubes en la ciudad, ¿qué problema hay en tener los escudos de todos ellos en la pared? En esos casos, que el del equipo favorito del bar sea un poco más ostentoso, se disculpa.

Hasta aquí estas medidas que ayudarán al hostelero a monetizar las jornadas de fútbol. No es necesario seguirlas todos y seguro que faltan muchas otras que también pueden ser implementadas. En ese caso, nadie mejor que el hostelero para saber qué acciones encajan mejor con su clientela, su local y sus necesidades. Por eso, no hay que tener miedo de probar cosas nuevas. El fútbol y ser creativo ayudan a que el negocio crezca.